Tengo 18 años y vengo de una familia pequeña, donde el único ejemplo de adulto que tuve fue mi mamá. Ella fue quien nos sacó adelante, con mucho esfuerzo nos educó a mí y a mis hermanos menores (de 16 y 13 años). Yo desde muy pequeño ya había empezado a adquirir experiencia laboral, ya que vi la necesidad de mi hogar y me puse a trabajar en lo que se podía. Pese a ello, yo no era capaz de dialogar con alguien, pues era demasiado tímido. Recién ahora cuando me pongo a recordar mi pasado digo ¡cuánta plata hubiera ganado si hubiera podido expresarme como ahora lo hago!
En el transcurso de mi vida fui errando como toda persona, cometí errores que me llevaron a alejarme de mi familia. Al principio me chocó bastante el estar apartado de mi familia ya que ellos dependían de mí al igual que yo de ellos. Gracias a Dios no todo fue color gris, gracias al distanciamiento que tuve con mi familia pude tener mucho tiempo para reflexionar y para llenarme de conocimientos. Mi mejor oportunidad llegó cuando conocía a La Tarumba y al programa Cuerda Firme. Ahí fue donde pude desarrollar muchas de las habilidades que ni siquiera yo sabía que las tenía:
Expresarme de una manera asertiva; expresarme de manera corporal; hacer malabares; superar mis miedos a nuevos retos. Descubrí que puedo lograr hacer muchas cosas, solo es cuestión de esfuerzo y perseverancia.
Aprendí a caminar en Zancos, a ser yo mismo, a decir lo que pienso, cómo elaborar un CV. Aprendí de los beneficios de un trabajo formal, de lo que esperan en mi trabajo, ¡el trabajo en equipo!
Y así muchas cosas más. Actualmente yo estoy trabajando en el Poder Judicial como auxiliar de administración y estoy cursando estudios en SENATI (ofimática) y FORGE (logística y humanística), en ambos me está yendo muy bien. Mi familia se siente muy feliz de que he mejorado de una manera sorprendente. Tengo muchos sueños, pero los que más resaltan en mi vida son ser un gran ingeniero de sistemas, el mejor de todos, acabar mi carrera de SENATI y FORGE y trabajar en el estado para contribuir con mis conocimientos a mi nación. En el camino, construir la casa de mi mamá, casarme, formar mi propia familia, ayudar a que mis hermanos menores también salgan adelante. Sé que con mucho esfuerzo lo lograré. Eso lo aprendí en Cuerda Firme. ¡Gracias Tarumba por dejarme pertenecer a su familia, con gran orgullo digo que soy tarumbo!